Pocos saben que en la plaza de San Pedro, junto a la columnata de Bernini, hay un dispensario médico para personas sin techo. Allí pueden hacer gratis el test del coronavirus, que es necesario para acceder a dormitorios o para regresar a su país.
Es una de las iniciativas del Vaticano para la Jornada Mundial de los Pobres que se celebra este domingo y que organiza el departamento del arzobispo Rino Fisichella. Por ejemplo, el Papa celebrará una Misa en la basílica, ante personas sin hogar.
El Arzobispo Rino Fisichella, presidente del Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización manifestó que en la “En la Basílica de San Pedro sólo habrá 100 personas, que representan a todos los pobres del mundo que, en este día, necesitan especialmente la atención y la solidaridad de la comunidad cristiana. También habrá algunos voluntarios y benefactores”.
La Jornada Mundial de los Pobres se celebra cada año un domingo de noviembre. El Vaticano pide a las diócesis que la concreten de alguna forma especial. El arzobispo ha presentado iniciativas de varios empresarios que están preparando miles de cajas de comida para personas necesitadas, o repartiendo mascarillas. O de una diócesis de Canadá que propuso que cada familia invitara a un sin techo a comer en su propia casa.
