Los capitalinos se hicieron presentes en los distintos camposantos de Tegucigalpa, donde honraron la memorias de sus seres queridos fallecidos decorando sus tumbas en donde elevan sus plegarias por su alma.
El cementerio de la aldea de Suyapa fue uno de los cementerios en que los ciudadanos llegaron a limpiar, pintar, decorar y cuidar las tumbas de sus familiares.
Por su parte el cementerio “Tierra Santa”, ubicado en la colonia La Travesía en la capital de Honduras, las familias acompañadas se reunieron alrededor de la tumba de cada uno de sus seres queridos.
Asimismo, el comercio informal desde tempranas horas se vieron abarrotados en donde las personas compraron flores, coronas y adornos para recordar la memoria de los difuntos.
