Este grito jubiloso se oyó resonar en todos los templos y también la Basílica Nuestra Señora de Suyapa, en donde se vivió con un inmenso júbilo la gran Vigilia Pascual, después de dos años de pandemia que impidió asistir a este templo a revivir esta celebración tan especial, presidida por Su Eminencia Cardenal Óscar Andrés Rodríguez, quien en esta oportunidad fue acompañado del rector de este magestuoso templo.
La celebración comenzó con la bendición del fuego y el encendido del Cirio Pascual, con el que todos los allí presentes encendieron sus velas para esperar el Pregón Pascual, y luego escuchar la riqueza Litúrgica que se prepara para este día.
Se entonó el Gloria y Aleluya, cantos que no los escuchamos desde La Cuaresma.
Mensaje
Luego de la proclamación del Evangelio Según San Lucas, el Cardenal Rodríguez, brindó su tan alentadora Homilía, en la que promulgó que Jesús nos decía a cada uno de nosotros ” He Resucitado y siempre estoy contigo, la muerte ya no es un verdadero limite, somos liberados por medio de la Resurreción”.Además dijo que esta era la noche donde le teniamos que pedir a ese Jesus nos limpie dem todo pecado”.
” Ese Jesús baja a las tinieblas de la guerra, (refiriendose a la guerra entre Rusia y Ucrania), esta Resurrección debe hacer desaparecer la guerra, también debe hacer desaparecer la cultura de la muerte, pidamos a Jesus que ilumine las tinieblas de nuestra Honduras, de la pobreza, enfermedad y la salud”.
Después de ello, se realizó el Sacramento del Bautismo y la confirmación, se roció con agua bendita al pueblo de Dios y se llevó a cabo los ritos propios de la celebración, al fina el Cardenal Rodríguez expresó “Cristo ha Resucitado” y el pueblo de Dios allí presente muy jubiloso respondió, verdaderamente ha resucitado”!
