Este fenómeno natural ha dejado a su paso múltiples consecuencias devastadoras. Sus remanentes están provocando grandes inundaciones y tornados en todo el noreste de Estados Unidos, incluidos los estados de Nueva York, Nueva Jersey y Connecticut.
Maryland, Nueva Jersey, Nueva York y Pennsylvania han informado de la existencia de víctimas mortales a causa de la tormenta, y hoy se están llevando a cabo labores de búsqueda, rescate y limpieza.
Daños
Nueva York declaró el estado de emergencia la madrugada del jueves cuando la región noreste de Estados Unidos fue azotada por lluvias torrenciales de los remanentes de Ida, lo que provocó fuertes inundaciones e informes de numerosos rescates acuáticos. La tormenta se trasladó a la región después de golpear Louisiana el domingo como un huracán de categoría 4.
Más de 977.000 hogares y empresas de Luisiana seguían sin electricidad el miércoles, según PowerOutage.US. En la mañana del miércoles se había restablecido el suministro eléctrico en pequeñas partes del este y el centro de Nueva Orleans.
En Nueva York se han producido 13 muertes según las autoridades. La gobernadora Kathy Hochul dijo que había hablado con el presidente Biden, quien le “garantizó” todo su apoyo tras una tormenta “devastadora”, “que rompió récords”. En Nueva York casi todas las líneas de metro de la ciudad fueron suspendidas debido a las inundaciones.
Los rescates acuáticos en Pensilvania se estiman en “miles”, ya que más de 370 carreteras permanecen cerradas en todo el estado.
El gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, dijo este jueves que el estado se está moviendo lentamente hacia el “modo de recuperación” y señaló que había un “largo camino por delante”. por otra parte, Connecticut ha declarado el estado de emergencia en respuesta a los daños masivos y generalizados por las inundaciones.
