A nivel mundial, el mes de octubre es considerado como el “mes rosa”, porque es dedicado a crear conciencia sobre el Cáncer de Mama, que es el tipo más común y mortal en las mujeres. En el caso de Honduras, según el Centro de Cáncer Emma Romero de Callejas, se finalizará el año con un promedio de 1,275 nuevos pacientes diagnosticados con esta patología. El doctor Genaro Aguilar, medico de esta institución explicó, detalla que a diario en el país tres a cuatro mujeres son diagnosticadas con Cáncer de Mama, además, que se cerrará este año con 527 muertes por este mal.
Testimonio
Nora Padilla, es madre de tres hijos, y hace cinco años le diagnosticaron cáncer. Ella narra que en el año 2018 estaba en una reunión familiar cuando ella sintió algo raro en su mama, que le salía sangre y le dolía un poco, pero no le dio importancia, por lo que pensó que se había golpeado. Meses después le comentó a sus hijos, y ellos le insistieron que fuera al hospital; en el 2019 asistió al médico junto a su esposo y su diagnóstico fue oír la terrible noticia.
“Es algo que uno no quiere escuchar. Recuerdo ese día muy bien; los ojos de mi compañero de vida, el hombre que no me ha dejado nunca, solo tomó mi mano y me dijo, “Tranquila, vamos a salir bien”, pero esas palabras más me dolían, con solo saber que podía morir y dejarlo solo con nuestros hijos”.
Tratamiento
Doña Nora, agregó que después de aceptar y llorar incansablemente que tenía esa enfermedad, aparte de todo ese dolor físico, estaba emocional destruida, y a esto se le suma la preocupación que podía quedar endeudada económicamente, ya que el tratamiento de cáncer es caro y en los hospitales públicos no se encuentran la mayoría de medicamentos que les recetan. Ella decidió aferrarse y confiar más en Dios, por lo que se sometió a seis quimioterapias y 25 radiaciones; perdió uno de sus senos, todo su cabello y bajó mucho de peso, pero hoy, esta dama junto a su familia, ha seguido luchando todo para decir que es sobre- viviente de esta enfermedad mortal.
Agradecida
Hoy esta guerrera luce su nuevo look, su cabellos está de color plata, su piel se mira radiante, su silueta es digna de una dama feliz y agradecida con la vida que el Padre Celestial le regaló de nuevo y comparte que ahora sus días son diferentes, más alegres. Si ella tiene momentos complica- dos, solo deja que sigan las horas y trata de no renegar ante nada, ya que con el pro- ceso de la enfermedad que pasó, ella considera que no le puede suceder algo peor, por lo que su objetivo cada día es disfrutar aún más a su familia, pero, ante todo, quererse ella como mujer, concluyó.
