La historia de la Virgen de los Ángeles, se remonta a la primera mitad del siglo XVII, en el año 1635, cuando una mujer joven indígena y pobre, quien se ha llamado Juana Pereira, al caminar por el bosque (Los Ángeles de Cartago hoy), descubre una pequeña imagen de la Virgen, sencillamente tallada en una piedra oscura, visiblemente colocada sobre una gran roca en la vereda del camino.
Al principio se le dio a la imagen el nombre de Virgen Morena por su apariencia. Luego la llamaron Virgen de los Pardos, por el poblado donde fue encontrada y después Reina de Cartago por ser la provincia donde se dio el hallazgo.
Por último, decidieron poner a la imagen el título de Nuestra Señora de los Ángeles , por habérsela encontrado un 2 de agosto, cuando la Orden Franciscana venera a su patrona como Santa María de los Ángeles.
La expresiva imagen mide aproximadamente 20 centímetros. Tiene los rasgos de una mestiza, cara redonda, ojos rasgados, nariz y bocas pequeñas, y está hecha de diferentes materiales, como jade, roca volcánica y grafito. En sus brazos y cubierto por el manto, la Virgen sostiene al Niño Jesús, que descansa en su pecho mientras señala con su mano derecha el inmaculado corazón.
En el año 1639 se construyó la primera iglesia en honor a la “Virgen Morena”. Al extenderse su devoción, los fieles decidieron construir en 1674 una iglesia digna de ella. Pero como un fuerte terremoto la destruyó por completo en 1822, se comenzó 2 años después, la construcción de un tercer templo, que también se desplomaría en 1910 por otro terremoto.
El actual Santuario Nacional se empezó a construir en el año de 1912 con una estructura antisísmica. El 26 de julio de 1935 el Papa Pio XI le otorgó el título de Basílica Menor.
El pueblo costarricense desde el hallazgo ha demostrado su amor y devoción a Nuestra Señora de loa Ángeles por medio de bellas tradiciones. Una de ellas es la ceremonia de Vestimenta Y Bendición realizada el 1 de Agosto, Víspera de la Fiesta Nacional.
En esta celebración el rector del Santuario le pone a la imagen un lindo vestido que llevará por un año. Luego, con la Virgen en sus manos, bendice a los fieles. Otra tradición muy pintoresca es la Romería, la gran caminata que realizan los fieles de todo el país y de otras partes de Centroamérica desde sus casas hasta la Basílica, con el fin de pedir o agradecer algún favor a la Virgen.
El 2 de agosto, día de la gran fiesta , la imagen es llevada hasta el altar construido en la plaza de la Basílica, donde se celebra la solemne Eucaristía. Después de Misa se lleva a cabo la grandiosa procesión anual, acompañada por las autoridades eclesiásticas y civiles junto a miles de fieles y peregrinos llegados de todas partes.