El departamento de Biblia y Catequesis de la Conferencia Episcopal de Honduras (C.E.H.), junto a la Asociación de Biblistas Católicos de Honduras y la Animación Bíblica Pastoral, propusieron que, en este mes de las Sagradas Escrituras, se centrará la meditación de la Palabra de Dios “Una escucha personal y comunitaria para suscitar esperanza”.
Bajo esta temática, proponen como primer punto de reflexión, la escucha del Señor. “La revelación bíblica es esencialmente Palabra de Dios al hombre. He aquí por qué, al paso que en los misterios griegos y la gnosis oriental la relación del hombre con Dios está fundada ante todo en la visión, según la Biblia la fe nace de la audición”, detalla el material nacional preparado para esta experiencia de fe. La escucha corresponde al estilo humilde de Dios. Es aquella acción que permite a Dios revelarse como Aquel que, hablando, crea al hombre a su imagen, y, escuchando, lo reconoce como su interlocutor.
Pedagogía
El Presbítero Tony Salinas, experto en la Palabra de Dios, señala que septiembre se convierte precisamente en un mes pedagógico más que celebrativo, en torno a la Palabra de Dios, “¿Qué puedo ofrecerle a la Biblia yo?, sino el homenaje de su lectura, un libro cerrado no instruye un libro que se abre y se lee puede ocasionar cambios fundamentales en la vida”.
Sobre esto amplía José Luis Parada, predicador del programa Buenas Nuevas, perteneciente a la Renovación Carismática Católica. El manifiesta que, “Para entender las Sagradas Escrituras, para discernirlas, hay que clamar Espíritu Santo y escuchar. De igual manera, entender el magisterio de la Iglesia y la doctrina es muy rica”.
Recomendaciones
San Jerónimo reiteraba constantemente que desconocer las escrituras es desconocer a Cristo. Es por ello que, algunos expertos ofrecen recomendaciones al inicio de este mes, para escudriñar los textos sagrados. La biblista Vanessa Osorio indica que, hay que empezar por escuchar la palabra y para ello, es recomendable hacer una lectura orante de la Palabra de Dios. “En primer lugar, yo recomendaría hacer una Lectio Divina de las lecturas qué propone la liturgia del día, sí en tu caso tenés el hábito de ir a Misa diaria, podrías como parte de tu momento de oración, hacer una lectura orante de esos textos. Leer la primera lectura, el salmo, el Evangelio, relacionarlas ver de qué elementos se relacionan entre sí, que me dice el Evangelio, que me dice esta lectura como primer punto”, expuso.
Otro consejo, señala Osorio, es que “tomes como una frase que te haya llamado la atención digamos si lo hiciste en familia, pues en mi familia digamos esta palabra fue la que nos llamó la atención, por ejemplo, en el mes de la Biblia respondo mucho esta palabra de Josué que dice: mi familia y yo serviremos al Señor. Yo recomendaría que saques una frase con tu familia y toda la semana este es como pone la esa frase en tu celular. Pone la quizás en un papelito que te haga recordar esa palabra”.
Santos Cecilio Oviedo, pertenece a la Animación Bíblica de Pastoral, y subraya sobre este cometido que, durante este mes es importante establecer un plan de lectura, es decir, un plan que nos guíe a través de la Biblia o estudiar por parte de específica, un libro. “Lo más importante es orar antes de leer, para que el Señor a través de su Espíritu nos abra la mente para que comprendamos lo que estamos leyendo o lo que Él no quiere no quiere transmitir a través de su Palabra”, puntualizó.
