El 26 de enero de 2023 de manera pública a través de una nota enviada desde la Santa Sede, Su Santidad el Papa Francisco manifiesta que “Ha aceptado la renuncia al Gobierno pastoral de la Diócesis de Trujillo, presentada por Su Excelencia Monseñor Luis Solé Fa, CM, y en el mismo acto, el Papa Francisco nombra al nuevo Obispo de Trujillo, al presbítero Jenry Orlando Ruíz Mora, quien también es Vicario de Pastoral”.
Monseñor Ruiz Mora, nació el 25 de enero de 1973 en Santa Cruz del Potrero, Juticalpa, Departamento de Olancho. Realizó sus estudios primarios en la escuela «Inmaculado Corazón de María» en Santa Cruz del Potrero, y sus estudios secundarios en el «Instituto Privado Juticalpa» en Juticalpa. En 1991 ingresó al Seminario Mayor de la Arquidiócesis de Tegucigalpa «Nuestra Señora de Suyapa», donde estudió filosofía y teología. El 18 de octubre de 1997 fue ordenado diácono, y el 30 de mayo de 1998 fue ordenado sacerdote en la Iglesia Catedral de Juticalpa; obtuvo un diploma en Misionología en México con las Obras Episcopales Pontificias de México y un diploma en la Doctrina Social de la Iglesia, a través de estudios subvencionados por la Universidad Pontificia de Salamanca (España), en cooperación con Cáritas.
No hay duda que su experiencia como párroco en varias comunidades, su trabajo al frente de la Pastoral Vocacional y Universitaria, el trabajo como responsable de los Delegados de la Palabra y de Cursillos de Cristiandad, Vicario de Pastoral y del Clero entre otros, serán fundamentales para enfrentar con acierto los retos y desafíos de una diócesis con un entorno multicultural y multiétnico, una experiencia extremadamente enriquecedora, pero a la vez llena de nuevas vivencias y no solo por las dificultades que implica el no hablar los diferentes dialectos locales, sino también, por los diferentes estilos de comunicar, las diferentes maneras de pensar y actuar ante las situaciones que se presentan diariamente, así, como la manera particular de resolver los conflictos o expresar críticas; afortunadamente su trabajo pastoral a lo largo de su vida como sacerdote en un territorio próximo a Colón y Gracias a Dios, le dan una ventaja que estamos seguros le permitirá interpretar adecuadamente y actuar en conformidad para lograr que la misión encomendada lleve a los pies de Dios y de María a miles de fieles dispersos en una vasta y exuberante geografía. Además, y a pesar de las desafiantes realidades que enfrenta ese territorio como la violencia, el crimen, la violación de los derechos por conflictos por la extracción a tajo abierto de minerales, el narcotráfico, la migración forzada de miles de jóvenes, el aumento de la pobreza y el aislamiento estamos seguros que Monseñor Jenry encontrará formas creativas de cumplir como pastor mediante el Evangelio y la Eucaristía que todos los fieles que viven en los departamentos de Colón y Gracias a Dios estén unidos entre sí, miembros de un mismo rebaño y bajo los cuidados de un mismo pastor para que la paz ocupe el lugar de la violencia, la rivalidad dé paso a la reconciliación y la vida a la muerte.
