La familia es la cuna de las vocaciones y durante los 50 días que dura la Pascua, es una oportunidad propicia para el discernimiento de los jóvenes y orar por ellos para que surjan más sacerdotes y vocaciones religiosas.
Vocaciones
Cada año se realiza una Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones en la cual el Santo Padre siempre pide que se reflexione sobre las palabras de la vocación. En la misiva que envió en el año 2020, que fue cuando la pandemia estaba en su punto más álgido, el Sucesor de Pedro recordó que “Toda vocación nace de la mirada amorosa con la que el Señor vino a nuestro encuentro, quizá justo cuando nuestra barca estaba siendo sacudida en medio de la tempestad”. El mundo ha sido sacudido fuertemente por la guerra y otras crisis post covid, pero aun así el Señor sigue llamando a los que Él desee para que cumplan su misión. Dixie Ballesteros, seminarista mayor dijo que “En todo momento, el Señor sigue llamando a hombres que sean capaces de reconocer su voz y seguirle para la misión que Él le tiene encomendada, entregar su propia vida para salvar la vida de muchos”.
1 Lectio Divina
El acercamiento a la Palabra de Dios a través de la Lectio Divina es una excelente propuesta de profundización en la Biblia y de discernimiento vocacional.
2 Rosario
A través del rezo del Rosario, los jóvenes que están en discernimiento vocacional pueden encomendar su vida y ministerio al cuidado de la Reina del Cielo.
